Mostrando entradas con la etiqueta Nueve Anclas. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Nueve Anclas. Mostrar todas las entradas

«Oskar y yo» de Maria Parr

 


Autora: Maria Parr
Traducción: Cristina Gómez-Baggethun 
Iustración: Zuzanna Celej
Género: Novela Juvenil - A partir de 10 años
Editorial: Nórdica Libros
Páginas: 180

No hay nada mejor que tener un hermano. Aunque a veces... Oskar y yo cuenta la historia de Ida y su hermano pequeño, Oskar. Ida es la narradora, pero el protagonista es el salvaje y testarudo Oskar. Este libro trata de safaris por el río en primavera o de vampiros desaparecidos en otoño. También sobre cabañas más pequeñas de lo que uno recuerda y de quioscos de cupcakes más bonitos de lo esperado... Y sobre cambios y pérdidas. Maria Parr ha escrito una trepidante y cálida historia para leer en voz alta que consigue que el lector vea la vida desde una perspectiva diferente a la que tenía antes. Oskar y yo es un homenaje a la vida cotidiana y a las relaciones entre hermanos.

                                       
(Fiskå, 1981). Escritora noruega. De pequeña ya era una narradora entusiasta, y mantenía despiertos a sus tres hermanos hasta altas horas de la madrugada con sus cuentos. Parr comenzó a escribir historias en la escuela. Estudió Lenguas y Literatura Nórdicas en la Universidad de Bergen. Actualmente es profesora a tiempo parcial en la escuela secundaria en Vanylven. Los libros de Maria Parr han ganado muchos premios, entre ellos el Luchs, el Premio Brage, el Silbernen Griffel y el Prix Sorcière. Su trabajo también ha sido publicado en numerosos países con mucho éxito. En 2015, recibió por Corazones de gofre el Súper Premio que otorga la prestigiosa revista Andersen de Italia al mejor libro del año.


                                      
Como opiniones hay muchas, voy a dar la mía. 

No hay nada mejor que tener un hermano. Aunque, a veces, tenerlo signifique sobrevivir a una avalancha diaria de energía, ocurrencias y caos. En Oskar y yo, Maria Parr nos regala una historia divertida, tierna y profundamente humana sobre los lazos que nos unen incluso cuando nos hacen perder la paciencia.

Ida, la narradora, nos introduce en su mundo cotidiano, ese universo donde su hermano pequeño Oskar reina con su carácter salvaje, testarudo y entrañable. A través de las estaciones, desde safaris primaverales por el río hasta misterios otoñales con vampiros imaginarios, Maria Parr construye una novela que respira infancia por todos sus poros: imaginación, descubrimiento, risas y también esos pequeños duelos que llegan con el paso del tiempo.

El talento de Maria Parr vuelve a brillar en su forma de retratar lo cotidiano con emoción y humor, consiguiendo que los lectores, tanto jóvenes como adultos, se vean reflejados en los enredos, las discusiones y los gestos de cariño que solo existen entre hermanos. Su prosa, siempre cálida y cercana, nos recuerda que crecer no es solo hacerse mayor, sino aprender a mirar el mundo con nuevos ojos. 

Las ilustraciones de Zuzanna Celej vuelven a ser el complemento perfecto: delicadas, expresivas y con esa atmósfera nórdica que envuelve la historia como un abrazo.

Ideal para lectores infantiles y juveniles a partir de diez años, pero también para adultos que disfrutan de la buena literatura que emociona sin artificios. Y es que, al acercarse las fechas navideñas, cuesta resistirse a volver al universo de Maria Parr, donde el invierno huele a galletas, amistad y travesuras compartidas.

                                           

Aquí va mi opinión personal, sin filtros:

Leer Oskar y yo ha sido como volver a mi propia infancia: a esos días en los que una pelea con un hermano podía durar cinco minutos… o toda la tarde, pero siempre terminaba en risas. Oskar me ha recordado a ese torbellino familiar que todos conocemos, el que te desespera y al mismo tiempo te llena la vida, y Ida, con su paciencia y ternura, es la voz que pone palabras a lo que muchos sentimos sin saber decir.

Me he reído con las ocurrencias de Oskar, me he emocionado con los pequeños momentos en que el amor fraternal se cuela sin pedir permiso, y he cerrado el libro con esa mezcla de nostalgia y gratitud que solo dejan las buenas historias.

Maria Parr tiene una sensibilidad única: convierte lo cotidiano en algo extraordinario, y consigue que lo más simple, un paseo por el río, un enfado, una tarde de juegos, se sienta trascendente. Oskar y yo no solo habla de la infancia, habla del amor en su forma más pura: la que se da sin pensar, con todas sus imperfecciones.

Quizás por eso me parece una lectura perfecta para estas fechas. Cuando el frío aprieta y uno busca historias que calienten el alma, Maria Parr siempre aparece con su mezcla de humor, ternura y verdad.

«Eso es porque empiezas a hacerte mayor, Ida. Cuando te haces mayor, las cosas se vuelven más pequeñas»
           
«𝑸𝒖𝒆 𝒅𝒊𝒔𝒇𝒓𝒖𝒕𝒆𝒏 𝒅𝒆𝒍 𝒗𝒊𝒂𝒋𝒆. 𝑪𝒐𝒏 𝒔𝒖𝒆𝒓𝒕𝒆 𝒐𝒔 𝒍𝒍𝒆𝒗𝒂𝒓á 𝒂 𝒍𝒖𝒈𝒂𝒓𝒆𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒏𝒖𝒏𝒄𝒂 𝒊𝒎𝒂𝒈𝒊𝒏𝒂𝒓𝒐𝒏»

#𝒚𝒐𝒍𝒆𝒐𝑵𝒐𝒗𝒆𝒍𝒂, ¿𝒚 𝒕ú?


Leer más

«Inventario de frutas y verduras» de Virginie Aladjidi y Emmanuelle Tchoukriel



AutorasVirginie Aladjidi y Emmanuelle Tchoukriel
Traducción: Pedro Á. Almeida
Publicación: 1 de mayo de 20169
Género: Divulgación / Inventarios Ilustrados/ A partir de 6 años
Editorial: Kalandraka
Páginas: 80


Un centenar de plantas comestibles reunidas en un hermoso catálogo vegetal para poner en valor la biodiversidad, la sostenibilidad y la alimentación saludable.

“Inventario ilustrado de frutas y verduras” reúne un centenar de deliciosos y nutritivos bocados: plantas comestibles que se pueden tomar crudas o cocinadas. Frutos, tallos, bulbos, raíces, semillas, hojas, flores… incluso productos -como tés, cafés, mermeladas o chocolates- que se obtienen a partir de sus materias primas. Tampoco faltan especias, hongos y algas. Los hay tan comunes como las uvas o las patatas, tan exóticos como la carambola, o con nombres tan sugerentes como la aguja de oro. Esta obra, bajo la supervisión científica de la doctora ingeniera agrónoma Paule Lacroix, permite distinguir entre el concepto botánico de la planta y el término culinario que surge de su elaboración para el consumo humano. Y sobre todo, contribuye a poner en valor la biodiversidad, la sostenibilidad y la alimentación saludable.

Agrupadas por colores, las frutas y verduras de este hermoso inventario muestran representaciones muy variadas: asociadas a la flor de la que proceden, en su medio natural o ya cosechadas, enteras o troceadas… Incluso la presencia de insectos como las indispensables abejas, aves, reptiles y pequeños herbívoros ayudan a contextualizar esta selección vegetal en su espacio.

                                       

Virginie Aladjidi

Durante años ha trabajado en revistas juveniles y editoriales. Actualmente se dedica a crear colecciones de libros y textos en colaboración con Caroline Pellissier. http://virginiealadjidi.blogspot.com

Emmanuelle Tchoukriel

Ha estudiado Artes Aplicadas, ampliando su formación en el ámbito de la comunicación visual antes de ingresar en la Escuela Estienne de París y especiali-zarse en ilustración médica y científica. http://tchouk-tchouk.blogspot.com

                                      

Como opiniones hay muchas, voy a dar la mía. 

La primera vez que abrí Inventario ilustrado de frutas y verduras sentí que me había colado en el cuaderno de un botánico con alma de artista. Virginie Aladjidi y Emmanuelle Tchoukriel no solo recopilan un centenar de frutas, verduras, raíces, semillas y hasta hongos, sino que lo hacen con una elegancia que haría suspirar a cualquier amante de la naturaleza o chef con alma de coleccionista.

Cada página es un pequeño museo de biodiversidad: calabazas que parecen posar para una naturaleza muerta, vainas de vainilla que se balancean con elegancia entre hojas y flores, y frutas tan exóticas que casi necesitas pasaporte para conocerlas. Todo está ilustrado con un nivel de detalle que hipnotiza y acompañado de textos que combinan ciencia y curiosidad con una ligereza deliciosa, sin caer nunca en el tono de un manual escolar.

El libro, además, tiene ese toque simple que te recuerda que comer es también una forma de cuidar el planeta. Y que detrás de una simple patata o un racimo de uvas hay una historia de sostenibilidad, agricultura y belleza natural.

Ideal para jóvenes a partir de seis años, y para cualquier adulto con curiosidad por el mundo vegetal, este libro ilustrado es una puerta preciosa a la biodiversidad y una invitación a mirar lo cotidiano con asombro.

Eso sí, aviso: tras leerlo, es posible que empieces a mirar tu nevera con otros ojos (y cierto sentimiento de culpa si lo único verde que tienes es el imán del supermercado).

                                           


Aquí va mi opinión personal, sin filtros:

Este libro me ha encantado. Es uno de libros que se hojean con calma, como quien recorre un jardín botánico sin prisa. Las ilustraciones de Tchoukriel son una joya: limpias, delicadas, y con un estilo que parece mezclar la precisión científica con la nostalgia de los cuadernos antiguos.

Además, me ha hecho sonreír más de una vez. Hay algo divertido en descubrir frutas que no sabías que existían y en pensar que las verduras que antes te parecían aburridas pueden ser protagonistas de un catálogo tan bonito.

No es un libro para leer de una sentada, sino para disfrutar a sorbos, como un té bien hecho. Ideal para curiosos, amantes de la naturaleza o para quienes creen que una berenjena también puede ser una obra de arte.

En resumen: un libro que entra por los ojos, despierta la curiosidad y te deja con hambre de aprender más.

«¡Bienvenido al mundo de las plantas, o, más ampliamente, al mundo de los vegetales!»
           
«𝑸𝒖𝒆 𝒅𝒊𝒔𝒇𝒓𝒖𝒕𝒆𝒏 𝒅𝒆𝒍 𝒗𝒊𝒂𝒋𝒆. 𝑪𝒐𝒏 𝒔𝒖𝒆𝒓𝒕𝒆 𝒐𝒔 𝒍𝒍𝒆𝒗𝒂𝒓á 𝒂 𝒍𝒖𝒈𝒂𝒓𝒆𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒏𝒖𝒏𝒄𝒂 𝒊𝒎𝒂𝒈𝒊𝒏𝒂𝒓𝒐𝒏»

#𝒚𝒐𝒍𝒆𝒐𝑵𝒐𝒗𝒆𝒍𝒂, ¿𝒚 𝒕ú?


Leer más

«Potencial asesino» de Hannah Deitch

 

AutoraHannah Deitch
Traducción: Teresa Lanero Ladrón de Guevara 
Publicación: 4 de septiembre de 2025 
Género: Ficción Contemporánea / Thriller
Editorial: AdN
Páginas: 347


«No todo lo que hice estuvo mal. Solo la mayor parte». 

Evie Gordon siempre fue una estudiante brillante y con un gran potencial. Por eso, estaba convencida de que, con esfuerzo, lograría todo lo que se propusiera y se convertiría en alguien importante. 

Sin embargo, tras graduarse en la universidad de élite que creía que le garantizaría este futuro, se topa con una realidad muy diferente: tiene un montón de deudas y un trabajo que no le apasiona como tutora particular de los hijos de algunas de las familias más ricas de los Ángeles. 

Todo cambia un domingo, cuando llega a su clase semanal en la mansión de los Victor y encuentra los restos de los padres esparcidos por su jardín trasero, y a una mujer pidiendo auxilio dentro de la casa. Evie acude a ayudarla y mientras trata de liberarla, ambas son descubiertas y, en cuestión de instantes, pasan de ser testigos a sospechosas y fugitivas. 

De repente, en el centro de una persecución a nivel nacional, Evie sabe que la única manera de limpiar su nombre es encontrar al verdadero asesino. Pero primero tendrá que derribar las barreras de su compañera, que se niega a hablar de lo que pasó y que rápidamente se ha convertido en la persona más importante en su vida patas arriba. Su trepidante viaje las lleva por todo Estados Unidos mientras los acontecimientos del caso conmocionan a la nación y la prensa enloquece con la historia de Evie: una niña superdotada convertida en asesina. Ahora sale en las portadas de todas las revistas y periódicos: es la nueva Charles Manson, una sanguinaria que quiere iniciar una guerra de clases. Evie por fin es alguien.

Potencial asesino es una novela mordaz, oscura y profundamente perspicaz. Un thriller trepidante que te mantendrá al borde del asiento, una historia de amor queer y una crítica irónica a los horrores del capitalismo tardío y a cómo las historias que nos venden sobre nuestro potencial pueden moldear el curso de nuestras vidas.


                                       




Hannah Deitch es una antigua tutora de SAT y actualmente candidata a doctorado en Literatura Inglesa en la UC Irvine, donde estudia teoría marxista y cultura pop contemporánea. Exeditora de una revista de arte y con un máster en periodismo por la USC, Hannah ha publicado en el LA Times, LA Weekly y LA Review of Books. Vive en Los Ángeles, donde también trabaja como editora en un estudio de videojuegos para móviles centrado en novelas románticas.

                                      

Como opiniones hay muchas, voy a dar la mía. 

Si alguna vez has sentido que hiciste todo “bien” y aun así la vida te pasó por encima, Potencial asesino te va a tocar la fibra. Con sangre, ironía y una protagonista que podría ser tu amiga o tu peor pesadilla. Y no porque sea solo un thriller (que lo es, y muy bueno), sino porque detrás del suspense hay una crítica afilada, una ironía brutal y una protagonista que es un cóctel explosivo de ambición, frustración y caos.

Evie Gordon era la típica chica brillante, la que lo hacía todo bien, la que creía que la excelencia era el pasaporte directo al éxito. Pero la vida, y el capitalismo salvaje, tenían otros planes. Acaba con deudas, trabajando como tutora de niños ricos en Los Ángeles, y preguntándose en qué momento su “gran futuro” se torció.

Y cuando parece que su vida no puede complicarse más, entra a una mansión y se topa con una escena de crimen salida de un true crime. A partir de ahí, todo se desmadra: Evie pasa de testigo a fugitiva, con una mujer misteriosa como única aliada y el país entero viéndola como una asesina en serie.

Lo mejor de todo es cómo Hannah Deitch convierte esta huida por carretera en una montaña rusa emocional. Hay tensión, sí, pero también humor negro, momentos de ternura y una historia queer preciosa que se abre paso entre el caos. Es una mezcla de Killing Eve, Gone Girl y un meme sobre lo imposible que es pagar el alquiler sin vender el alma.

Más allá de la trama (que engancha como pocas), Potencial asesino habla de lo que pasa cuando nos creemos el mito del “si te esfuerzas, lo conseguirás”. De cómo el sistema exprime incluso a los que hacen todo “bien”. Y de cómo, a veces, solo cuando todo se derrumba, aparece la posibilidad de ser realmente alguien, aunque sea una fugitiva buscada a nivel nacional.

                                           


Aquí va mi opinión personal, sin filtros:

He devorado este libro. Y no solo porque el ritmo sea de infarto, sino porque debajo del suspense hay verdad. Evie me ha hecho retorcerme en el sofá, gritar y decir “ay, amiga, te entiendo demasiado”. Esa presión constante por ser alguien, por destacar, por no fallar… y luego ver cómo el mundo real te da una bofetada.

La historia es adictiva, sarcástica y con un punto de mala leche que me encanta. Hannah Deitch no se corta: se ríe de los gurús del éxito, de la meritocracia y de los titulares sensacionalistas. Pero lo hace con inteligencia y empatía, sin sermones.

Y luego está la relación entre Evie y su compañera, intensa, torpe, dulce, peligrosa, que añade una capa emocional preciosa a toda la locura. Unas Bonnie y Bonnie de la era de los memes y la ansiedad existencial, donde el amor también se convierte en un acto de supervivencia. 

Cuando terminé el libro, tuve que quedarme un rato mirando la pared y pensando en cuántas Evies conozco. Y en cuántas veces todos hemos sentido que el sistema está hecho para que, hagas lo que hagas, pierdas.

Un thriller diferente, con alma, con crítica, con rabia y con mucho corazón.

«La violencia habita en nosotros. Para invocarla solo hace falta abrir la puerta»
           
«𝑸𝒖𝒆 𝒅𝒊𝒔𝒇𝒓𝒖𝒕𝒆𝒏 𝒅𝒆𝒍 𝒗𝒊𝒂𝒋𝒆. 𝑪𝒐𝒏 𝒔𝒖𝒆𝒓𝒕𝒆 𝒐𝒔 𝒍𝒍𝒆𝒗𝒂𝒓á 𝒂 𝒍𝒖𝒈𝒂𝒓𝒆𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒏𝒖𝒏𝒄𝒂 𝒊𝒎𝒂𝒈𝒊𝒏𝒂𝒓𝒐𝒏»

#𝒚𝒐𝒍𝒆𝒐𝑵𝒐𝒗𝒆𝒍𝒂, ¿𝒚 𝒕ú?


Leer más

«Lena, Theo y el mar» de Maria Parr




Autora: Maria Parr
Traducción: Cristina Gómez-Baggethun 
Iustración: Zuzanna Celej
Género: Novela Juvenil - A partir de 10 años
Editorial: Nórdica Libros
Páginas: 264

Lena, Theo y el mar es la continuación del exitoso Corazones de gofre. Los libros de Maria Parr tienen cientos de miles de seguidores en todo el mundo, y es considerada la nueva Astrid Lindgren. ¡A veces Lena puede ser realmente desagradable! ¿Por qué siempre lo hace todo tan difícil? Eso es lo que Theo, su mejor amigo, se pregunta. Este año va a ser especial. Tienen una nueva amiga, Birgitte, una niña muy dulce que viene de Holanda. Sin embargo, Lena tiene muchas razones para estar enojada: el nuevo entrenador de fútbol siempre la mantiene en el banquillo, el hermanito que anhela nunca llega y la expedición al mar con la nueva balsa resulta ser un fiasco. Y el abuelo… ¡Casi les da un susto! Esta es la historia de un año lleno de aventuras en Terruño Mathilde. Lena, Theo y el abuelo nos demuestran otra vez que pueden con todo.

                                       
(Fiskå, 1981). Escritora noruega. De pequeña ya era una narradora entusiasta, y mantenía despiertos a sus tres hermanos hasta altas horas de la madrugada con sus cuentos. Parr comenzó a escribir historias en la escuela. Estudió Lenguas y Literatura Nórdicas en la Universidad de Bergen. Actualmente es profesora a tiempo parcial en la escuela secundaria en Vanylven. Los libros de Maria Parr han ganado muchos premios, entre ellos el Luchs, el Premio Brage, el Silbernen Griffel y el Prix Sorcière. Su trabajo también ha sido publicado en numerosos países con mucho éxito. En 2015, recibió por Corazones de gofre el Súper Premio que otorga la prestigiosa revista Andersen de Italia al mejor libro del año.


                                      
Como opiniones hay muchas, voy a dar la mía. 

Después del entrañable Corazones de gofre, María Parr nos invita a regresar a Terruño Mathilde, ese pequeño rincón noruego donde las aventuras y los afectos se mezclan con el olor del mar y el sonido de las olas.

En esta nueva entrega, Lena, Theo y el mar, reencontramos a Lena, la niña más valiente, impulsiva y testaruda que uno pueda imaginar, y a Theo, su inseparable amigo, paciente, reflexivo y lleno de corazón. Pero este año será distinto: hay una nueva amiga, Birgitte, llegada desde Holanda; un entrenador de fútbol que no valora a Lena como debería; un abuelo que asusta con un susto de salud; y una balsa que, aunque prometía aventuras, acaba siendo un desastre.

La autora vuelve a regalarnos una historia llena de humanidad y ternura, donde los pequeños dramas de la infancia se sienten tan grandes como el propio fiordo que rodea el pueblo. Lena no siempre acierta, pero es imposible no quererla. Y Theo… Theo es ese amigo que todos querríamos tener, el que se queda cuando todo parece torcido.

Maria Parr escribe con una sensibilidad especial, capaz de capturar el caos y la belleza de crecer sin perder el humor ni la dulzura. Su estilo recuerda, con razón, a Astrid Lindgren: una mirada luminosa, divertida y profunda sobre la infancia.

Y, como siempre, las ilustraciones de Zuzanna Celej aportan una capa más de magia: delicadas, envolventes y con esa atmósfera que hace que uno quiera quedarse a vivir dentro de sus páginas.

Lena, Theo y el mar no es solo una historia sobre la amistad y la aventura; es también un retrato del paso del tiempo, de las frustraciones, del deseo de pertenecer y del amor en todas sus formas: el que une a los amigos, el que sostiene a la familia, el que hace que sigamos adelante aunque las cosas no salgan como esperamos.

                                           

Aquí va mi opinión personal, sin filtros:

Ya conocía a Lena y Theo de Corazones de gofre, una historia que me robó el corazón y que aún asocio con tardes de infancia, risas y gofres recién hechos. Volver a Terruño Mathilde ha sido como reencontrarme con unos viejos amigos: más grandes, más conscientes del mundo, pero igual de adorables y reales.

Lena me ha hecho reír y enfadar casi a partes iguales. Es pura vida, pura contradicción. Y Theo… Theo es ese tipo de personaje que te gana con los silencios, con la lealtad, con su ternura sin dramatismos. Entre ambos hay una complicidad que no necesita grandes gestos, solo miradas, palabras torpes y momentos compartidos.

María Parr tiene una habilidad preciosa: logra hablar de temas importantes: la amistad, la pérdida, el deseo de ser visto y comprendido, sin perder nunca la ligereza. Todo fluye con naturalidad, con humor y con una verdad que desarma.

Y no puedo no mencionar las ilustraciones de Zuzanna Celej: cada página es un soplo de calma, un abrazo visual que acompaña a la historia sin eclipsarla.

Cuando terminé el libro, cerré las tapas con una sonrisa melancólica. Porque Lena, Theo y el mar no es solo una historia para niños. Es una historia para cualquiera que haya tenido un amigo del alma, un abuelo sabio o un sueño que parecía imposible.

Ojalá todos pudiéramos volver, de vez en cuando, a nuestro propio Terruño Mathilde: ese lugar donde la vida, con todos sus líos, todavía sabe a sal, a risa y a gofres calientes.

«Está todo tan bien hecho, Theo, que la mayoría de lo que estropeamos en este mundo podemos arreglarlo después»
           
«𝑸𝒖𝒆 𝒅𝒊𝒔𝒇𝒓𝒖𝒕𝒆𝒏 𝒅𝒆𝒍 𝒗𝒊𝒂𝒋𝒆. 𝑪𝒐𝒏 𝒔𝒖𝒆𝒓𝒕𝒆 𝒐𝒔 𝒍𝒍𝒆𝒗𝒂𝒓á 𝒂 𝒍𝒖𝒈𝒂𝒓𝒆𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒏𝒖𝒏𝒄𝒂 𝒊𝒎𝒂𝒈𝒊𝒏𝒂𝒓𝒐𝒏»

#𝒚𝒐𝒍𝒆𝒐𝑵𝒐𝒗𝒆𝒍𝒂, ¿𝒚 𝒕ú?


Leer más

«Fantástica historia de amor» de Sophie Divry


Autora: Sophie Divry
Traducción: Íñigo Jáuregui
Publicación: 23 de junio de 2025 
Género: Ficción Contemporánea
Editorial: Nórdica Libros
Páginas: 432 


JáureguiPremio a la Mejor Novela para el Verano de France Bleu y las Librerías independientes de Francia.

Bastien, inspector de trabajo en Lyon, debe investigar un accidente: un trabajador de una empresa de tratamiento de residuos ha muerto aplastado por una compactadora. Maïa, periodista científica, acude al CERN, el prestigioso centro de investigación nuclear de Ginebra, para escribir un artículo sobre el cristal centelleador, un nuevo material cuyas propiedades desconciertan a sus inventores. Bastien se entera de que el accidente fue en realidad un homicidio. Maïa descubre que el experimento salió mal. Su tía, física en esa importante institución europea, le pide ayuda para deshacerse de este cristal que se ha vuelto tóxico… Esta deslumbrante novela que toma prestados los códigos del thriller es también una historia de amor: el inesperado encuentro de un hombre solitario y una mujer que ha hecho de su independencia una muralla.


                                       

(Montpellier, 1979). 

Activista de los movimientos feministas, ha ejercido el periodismo en publicaciones como La Décroissance y Le Monde Diplomatique. En sus cuatro novelas, Divry ha sometido a crítica diferentes aspectos de la sociedad del momento: explora la soledad en Signatura 400, las creencias religiosas en Journal d’un recommencement, la insatisfacción cotidiana en La condition pavillonnaire. Es reconocida como una de las novelistas más destacadas de la nueva generación de narradores franceses.

                                      

Como opiniones hay muchas, voy a dar la mía. 

Lo fascinante de Fantástica historia de amor es que nunca sabes del todo qué estás leyendo: ¿un thriller? ¿un romance? ¿un retrato de soledades? En realidad, es todo eso a la vez.

Sophie Divry juega a mezclar géneros, atmósferas y registros con una naturalidad sorprendente: empieza como un thriller con tintes científicos, sigue como una intriga social y termina siendo, sí, lo que promete el título, una historia de amor. Pero no de esas que se adivinan a kilómetros, sino de las que se construyen paso a paso, con silencios, resistencias y el vértigo de lo inesperado.

La trama se abre con dos hilos aparentemente inconexos. Por un lado, Bastien, inspector de trabajo en Lyon, investiga la muerte de un operario en una planta de tratamiento de residuos. Lo que parece un accidente se revela pronto como homicidio, y el hallazgo abre un abanico de sospechas sobre intereses ocultos y prácticas empresariales turbias.

Por otro lado, Maïa, periodista científica, viaja al CERN para cubrir un proyecto revolucionario: un cristal centelleador que podría transformar el futuro de la investigación nuclear. Sin embargo, lo que encuentra es un experimento fallido, un material convertido en amenaza, y la petición desesperada de su tía, física en el instituto, para deshacerse de aquello que nunca debió salir de los laboratorios.

Cuando ambos mundos colisionan, lo que surge no es solo el cruce de dos investigaciones, sino el encuentro entre dos personajes aparentemente opuestos: Bastien, un hombre marcado por la soledad y la rutina, y Maïa, una mujer que ha hecho de su independencia una coraza. El choque entre ellos no resulta inmediato ni previsible: es áspero, lleno de dudas, pero también profundamente humano.

Lo más fascinante de esta novela es cómo Divry logra que la tensión de un thriller científico conviva con la intimidad de una historia de amor. El suspense no desaparece, los intereses económicos, las conspiraciones y el misterio del cristal sostienen el pulso narrativo, pero en medio del peligro late una pregunta esencial: ¿qué pasa cuando alguien irrumpe en tu vida y la tambalea justo cuando habías aprendido a vivir en soledad?

El estilo de Divry es ágil, pero nunca superficial. La autora trenza diálogos tensos con descripciones precisas, alternando lo técnico con lo íntimo, lo colectivo con lo personal. Hay momentos que parecen sacados de un informe periodístico, y otros que rozan la confesión íntima. Esa oscilación es la que da a la novela su carácter único.

En definitiva, Fantástica historia de amor es mucho más que un thriller disfrazado de romance o una historia romántica envuelta en conspiraciones científicas. Es un relato sobre dos personas que se encuentran en medio del caos, y que descubren que la mayor revolución, más allá de la ciencia o la justicia, puede ser simplemente dejarse afectar por el otro.

                                           


Aquí va mi opinión personal, sin filtros:

Esta novela me atrapó porque lo tiene todo: ciencia, misterio, suspense… y una historia de amor que no se ve venir, pero que, cuando llega, golpea fuerte. Confieso que lo que más disfruté fue el choque de personalidades entre Bastien y Maïa: él, gris y metódico; ella, independiente hasta la terquedad. Y ver cómo, poco a poco, esas murallas se resquebrajan me pareció más emocionante que cualquier giro de la trama.

Me encantó cómo Sophie Divry maneja lo científico sin convertirlo en un muro inaccesible para el lector. Habla de cristales, experimentos y conspiraciones, sí, pero con un pulso narrativo que nunca te deja fuera. A ratos parece que estás leyendo un thriller a lo Michael Crichton; en otros, una novela intimista francesa. Y esa mezcla es un gustazo.

Si tengo que ponerle un “pero”, sería que en algunos pasajes la parte técnica puede hacerse un poco densa. Pero a mí eso me dio igual, porque lo importante, lo que se queda contigo, es el viaje de dos personajes que no esperaban encontrarse y que terminan descubriendo que quizá, solo quizá, no estaban tan condenados a la soledad como pensaban.

Lo terminé con esa sensación de haber leído algo distinto, de esos libros que no encajan del todo en una etiqueta y que por eso funcionan tan bien.

«Es una de las reglas básicas no llegar nunca el primero. El primero que llega a una fiesta es un perdedor»
           
«𝑸𝒖𝒆 𝒅𝒊𝒔𝒇𝒓𝒖𝒕𝒆𝒏 𝒅𝒆𝒍 𝒗𝒊𝒂𝒋𝒆. 𝑪𝒐𝒏 𝒔𝒖𝒆𝒓𝒕𝒆 𝒐𝒔 𝒍𝒍𝒆𝒗𝒂𝒓á 𝒂 𝒍𝒖𝒈𝒂𝒓𝒆𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒏𝒖𝒏𝒄𝒂 𝒊𝒎𝒂𝒈𝒊𝒏𝒂𝒓𝒐𝒏»

#𝒚𝒐𝒍𝒆𝒐𝑵𝒐𝒗𝒆𝒍𝒂, ¿𝒚 𝒕ú?



Leer más

«La habitación alemana» de Carla Maliandi



Autora:Carla Maliandi
Idioma: Castellano
Publiación: 2 de octubre 2024
Género: Ficción Contemporánea
Editorial: Barrett
Páginas160

La habitación alemana consigue contar, con extrañeza y distanciamiento, la historia de un personaje paralizado en un paréntesis en su vida. La protagonista, una treintañera de la cual desconocemos su nombre, viaja a Heidelberg, ciudad cargada de recuerdos familiares y ecos del pasado, y allí se enfrenta a situaciones tan absurdas como trágicas, sin lograr entender su propio papel dentro de ellas, hasta un final extraño a la vez que inolvidable. Este es el extraordinario debut de Carla Maliandi, una «novela de no aprendizaje», sin moraleja ni crecimiento personal (porque tú también odias los libros de autoayuda, ¿verdad?). «La habitación alemana fue un disfrute mientras la escribía. Escribir sin pensar en publicar es una bendición».

                                       
La argentina Carla Maliandi (1976) es dramaturga, escritora, directora teatral y docente. Cursó grado y posgrado de Actuación en la Universidad Nacional de las Artes, en Buenos Aires. Su primera novela, La habitación alemana, nació en talleres literarios impartidos por Julián López y Selva Almada. Fue publicada originalmente en su país por la editorial Mardulce en 2017, ha sido traducida al inglés, francés, alemán, portugués, se han vendido sus derechos cinematográficos y fue nominada para el Premio Liberaturpreis de la Feria del Libro de Frankfurt. Su segunda novela, La estirpe (Random House, 2021), fue una de las finalistas del Premio Fundación Medifé Filba y también se va a traducir al inglés y al portugués. Como dramaturga ha escrito y dirigido siete obras y ha participado en múltiples festivales a nivel nacional e internacional. Actualmente es profesora de escritura en la Universidad Nacional de las Artes.

                                      
Como opiniones hay muchas, voy a dar la mía. 

Hay libros que no vienen con lecciones de vida ni frases de taza motivacional, y menos mal. La habitación alemana es de esos: una historia que no quiere ser terapia ni manual de autoayuda (¡gracias, Carla, por ese regalo!), sino un viaje extraño y magnético que se lee casi de un tirón.

Aquí seguimos a una protagonista sin nombre, y eso ya dice mucho, una treintañera que huye de su vida en Buenos Aires y se planta en Heidelberg, ciudad de su infancia. ¿Con qué se encuentra? Con un edificio de habitaciones baratas, personajes rarunos que entran y salen, y la incomodidad de estar en un sitio que no acaba de ser suyo. 

Lo curioso es que mientras lees no esperas moralejas, pero sin querer te descubres pensando en tus propias fugas, en esos momentos en los que todos quisiéramos pulsar el botón de reset. A veces la narración es tan gris como un invierno alemán, otras veces surrealista, casi absurda, y en otras hasta cómica. Esa mezcla es lo que hace que no quieras soltarlo. 

Carla Maliandi escribe con una voz honesta, que no busca adornos innecesarios. Y eso engancha. Es como si te sentaras a escuchar a una amiga que te cuenta algo raro que le pasó… y de pronto te das cuenta de que estás metidísimo en su relato. 

                                           

Aquí va mi opinión personal, sin filtros:

Esta novela me atrapó porque no promete nada y, sin embargo, lo da todo. No busca enseñarte, pero te remueve. Es rara, áspera, humana y muy, muy adictiva. Yo no sé si la protagonista encontró respuestas en Heidelberg, pero yo encontré una lectura de esas que se quedan rondando en la cabeza y que vuelves a recordar en momentos insospechados.

Quizá, y lo digo con un “quizá” muy grande, el único “pero” que algunos lectores podrían ponerle es que está escrita en argentino. Hay quien puede sentirse algo incómodo o incluso cansado con ciertos giros idiomáticos. A mí, en cambio, me ocurrió lo contrario: ese detalle me metió aún más en la historia. Sentí que la voz de la narradora era completamente real, como si estuviera leyendo una carta escrita solo para mí. Esa cercanía, ese tono íntimo y directo, hizo que la lectura me resultara todavía más verosímil y emocionante.

Y ese final… ¡ay, ese final! Tan inesperado, tan poco convencional, que no lo vi venir, pero cuanto más lo pienso, más creo que no podía haber otro mejor. O quizá sí… 

En definitiva, La habitación alemana no es una historia que busque moralejas ni grandes respuestas, pero sí es una experiencia literaria honesta y profundamente humana.

«No existe mejor cosa en el mundo en este momento que la soledad de mi cuarto alquilado, mi guarida europea sin lujos pero llena de confort, los fuertes postigos de la ventana, el edredón blanco, la almohada impecable»
           
«𝑸𝒖𝒆 𝒅𝒊𝒔𝒇𝒓𝒖𝒕𝒆𝒏 𝒅𝒆𝒍 𝒗𝒊𝒂𝒋𝒆. 𝑪𝒐𝒏 𝒔𝒖𝒆𝒓𝒕𝒆 𝒐𝒔 𝒍𝒍𝒆𝒗𝒂𝒓á 𝒂 𝒍𝒖𝒈𝒂𝒓𝒆𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒏𝒖𝒏𝒄𝒂 𝒊𝒎𝒂𝒈𝒊𝒏𝒂𝒓𝒐𝒏»

#𝒚𝒐𝒍𝒆𝒐𝑵𝒐𝒗𝒆𝒍𝒂, ¿𝒚 𝒕ú?



Leer más

«Corazones de gofre» de Maria Parr

 


Autora: Maria Parr
Traducción: Cristina Gómez-Baggethun
Ilustraciones: Zuzanna Celej
Género: Novela Juvenil - A partir de 10 años
Editorial: Nórdica Libros
Páginas: 176

En un pequeño pueblo de la costa noruega, Terruño Mathilde, viven Lena y Theo. Ella es intrépida, di vertida y muy aventurera. Él, la mente serena de los dos. Son amigos del alma, aunque Theo a veces necesitaría que se lo dijeran, un poco más a menudo, como a todos por otra parte. Lena vive sola con su madre y, de vez en cuando, piensa que le gustaría tener un padre. Theo tiene una hermana adoptada en Colombia y un abuelo flaco y arrugado, que vive en el sótano de su casa y al que adora. Lo que más les gusta es compartir los ricos y calentitos gofres de la tía abuela y pasar el día juntos corriendo aventuras que, alguna que otra vez, están a punto de terminar en catástrofe, por parte de la alocada Lena. Éste es el reino de Lena y Theo. ¿Te vienes a conocerlo?

                                       
(Fiskå, 1981). Escritora noruega. De pequeña ya era una narradora entusiasta, y mantenía despiertos a sus tres hermanos hasta altas horas de la madrugada con sus cuentos. Parr comenzó a escribir historias en la escuela. Estudió Lenguas y Literatura Nórdicas en la Universidad de Bergen. Actualmente es profesora a tiempo parcial en la escuela secundaria en Vanylven. Los libros de Maria Parr han ganado muchos premios, entre ellos el Luchs, el Premio Brage, el Silbernen Griffel y el Prix Sorcière. Su trabajo también ha sido publicado en numerosos países con mucho éxito. En 2015, recibió por Corazones de gofre el Súper Premio que otorga la prestigiosa revista Andersen de Italia al mejor libro del año.

                                      
Como opiniones hay muchas, voy a dar la mía. 

En el pequeño pueblo costero de Terruño Mathilde, la vida tiene su propio ritmo, marcado por las risas, las travesuras y los gofres recién hechos. Lena es pura chispa: intrépida, divertida y capaz de liarla parda en cualquier momento. Theo, más tranquilo y reflexivo, la acompaña como su amigo del alma, aunque a veces solo necesita que alguien le recuerde lo importante que es.

La historia está contada desde los ojos de Theo, y eso hace que todo se sienta más cercano y auténtico. Vemos sus deseos, sus miedos y sus alegrías con una sinceridad que solo un niño puede transmitir. Theo quiere que Lena sepa que siempre contará con él, y Lena sueña con tener un padre para compartir su cumpleaños. Al final, ambos nos recuerdan que todos buscamos afecto y cercanía en nuestra vida.

Maria Parr consigue que la novela sea mucho más que una historia juvenil: sus personajes son reales, las situaciones divertidas y tiernas a la vez, y todo ello se enmarca en paisajes y escenarios noruegos que enamoran. El fiordo y el mar y los pequeños rincones del pueblo hacen que Terruño Mathilde se quede contigo mucho después de cerrar el libro.

Aunque pensada para jóvenes, Corazones de gofre tiene una magia que atrapa también a los adultos: nos hace recordar la infancia, nos transporta a esos días llenos de juegos, risas y complicidad, y nos recuerda que la vida puede ser tan sencilla y maravillosa como compartir un gofre caliente con un amigo.

Y lo mejor es que la historia no termina aquí: después de Corazones de gofre, Lena y Theo nos esperan en Lena, Theo y el mar. Así que, si te has encariñado con ellos (y te aseguro que lo harás), todavía hay más aventuras, risas y momentos entrañables por descubrir.

                                           

𝑨𝒒𝒖í 𝒗𝒂 𝒎𝒊 𝒐𝒑𝒊𝒏𝒊ó𝒏 𝒑𝒆𝒓𝒔𝒐𝒏𝒂𝒍, 𝒔𝒊𝒏 𝒇𝒊𝒍𝒕𝒓𝒐𝒔: 

Ha sido como asomarme por la ventana a mis propios recuerdos de infancia: tardes eternas, travesuras que se convertían en epopeyas y esa sensación de que la amistad lo podía todo.

Me he reído a carcajadas con la energía salvaje de Lena, que parece no tener miedo a nada, y me he enternecido con Theo, siempre fiel, siempre con esa necesidad silenciosa de sentirse querido. 𝑳𝒂 𝒕í𝒂 𝒂𝒃𝒖𝒆𝒍𝒂 𝒚 𝒔𝒖𝒔 𝒈𝒐𝒇𝒓𝒆𝒔 𝒎𝒆 𝒉𝒂𝒏 𝒑𝒂𝒓𝒆𝒄𝒊𝒅𝒐 𝒅𝒊𝒓𝒆𝒄𝒕𝒂𝒎𝒆𝒏𝒕𝒆 𝒑𝒂𝒕𝒓𝒊𝒎𝒐𝒏𝒊𝒐 𝒍𝒊𝒕𝒆𝒓𝒂𝒓𝒊𝒐 𝒅𝒆 𝒍𝒂 𝒉𝒖𝒎𝒂𝒏𝒊𝒅𝒂𝒅.

Es un libro que emociona porque no se queda solo en la superficie alegre y aventurera. También habla de la soledad, de la familia, de la pérdida… pero lo hace con un calor y una chispa que se te queda en el corazón.

Y no puedo dejar de mencionar las ilustraciones de Zuzanna Celej, que son bellísimas: delicadas, evocadoras y con esa magia que acompaña y eleva la historia sin robarle protagonismo.

Cuando lo terminé pensé: ojalá todos hubiéramos tenido un lugar como Terruño Mathilde, un amigo como Lena o Theo y, claro, un buen plato de gofres esperando en la mesa.

«¿Quieres decir que los días normales son mejores que la Navidad?»
           
«𝑸𝒖𝒆 𝒅𝒊𝒔𝒇𝒓𝒖𝒕𝒆𝒏 𝒅𝒆𝒍 𝒗𝒊𝒂𝒋𝒆. 𝑪𝒐𝒏 𝒔𝒖𝒆𝒓𝒕𝒆 𝒐𝒔 𝒍𝒍𝒆𝒗𝒂𝒓á 𝒂 𝒍𝒖𝒈𝒂𝒓𝒆𝒔 𝒒𝒖𝒆 𝒏𝒖𝒏𝒄𝒂 𝒊𝒎𝒂𝒈𝒊𝒏𝒂𝒓𝒐𝒏»

#𝒚𝒐𝒍𝒆𝒐𝑵𝒐𝒗𝒆𝒍𝒂, ¿𝒚 𝒕ú?



Leer más
data:olderPageTitle data:homeMsg